Scoop (2006)

Joe Strombel (Ian McShane) el famoso periodista, descubre por un soplo después de su muerte, que el buscado asesino del tarot, no es otro que el multimillonario Peter Lyman (Hugh Jackman). Mientras el conocido prestidigitador Sid Waterman (Woody Allen) hace desaparecer a Sondra (Scarlett Johansson) estudiante de periodismo, se le aparece Strombel y le revela el secreto que la podrá llevar a la fama.

Woody Allen hace una película al año y esta es la del 2006. Dentro de lo que se puede esperar, entra la clásica comedia. Recordando considerablemente a ‘Misterioso asesinato en Manhattan’ (1993), ‘Scoop’ introduce de nuevo la intriga del asesinato, la cómica curiosidad y desenfadado desarrollo de los acontecimientos. Allen escoge por segunda vez a Johannsson, tras ‘Macht Point’ (2005) pero con otra perspectiva distinta y más luminosa de un nuevo Londres. También revive a su propio y archirreconocido personaje surrealista, dubitativo, extraño y complicado. A pesar de la repetición de los tópicos de Woody Allen el divertidísimo largometraje no deja de asombrar al espectador, riéndose irónicamente de la alta sociedad inglesa y de todo lo que encuentra a su paso.

Lo absurdo de la situación puede dar a entender que es una película sin más, pero a pesar de un presupuesto tan ajustado, la realización es estupenda. No es posible acostumbrarse a las ideas de este interesante y aclamado director neoyorkino, que no deja de sorprender y absorber al público con las mismas inquietudes de siempre. La relación padre-hija de la película es memorable, convirtiéndose en el centro de un filme muy entretenido.