Training Day

Todavía no he dicho nada, pero soy un gran admirador de Denzel Washington. Tras John Q, El Coleccionista de Huesos, Dejavú, El Fuego de la Venganza, Antwone Fisher, Huracán Carter, , Tiempos de Gloria, Marea Roja… y algunas más, se confirma, es uno de los grandes. Sin embargo cuando vi Training Day, no supe qué decir. Su actuación magistral en el filme (por la que ganó el Oscar en 2001), eclipsa lo demás. Sin embrago la película no carece de interés. Jake (Ethan Hawke, El Club de los Poetas Muertos, Gattaca) es policía y aspira a convertirse en inspector. Alonzo (Denzel) el inspector que va a “ver lo que vale”, le llama la atención  desde el principio por su actitud liberal conforme al reglamento de la academia. Poco a poco descubre hasta donde se puede llegar enseñando una placa. El largometraje, lleno de acción y diálogo al mismo tiempo, puede parecer vulgar, sin embargo esconde toda una filosofía de pensamiento detrás del personaje de Alonzo y el estudio que de él hace Jake, desde el cual se sitúa la perspectiva y visión de la película. Antoine Fuqua convierte este filme en su obra maestra, acompañado por el guión de David Ayer que ambienta perfectamente los diálogos en la situación de barrios bajos, etc. Alonzo demuestra también que Denzel es más que valido en cuanto a variedad de papeles, observamos que este en concreto es bien distinto a todos los anteriores y sale triunfante. Durante las dos horas de thriller, la corrupción, la soberbia, el respeto, el vicio, el miedo, la honestidad, la ira, la ambición… (componentes de la vida humana) se ven reflejados en la obra, no dejando pasar está película como las demás.  Realmente lo que ocurre es que no sé de que manera decir el nombre del ingrediente, que hace única esta película, no es “una peli de acción” sino: LA PELÍCULA.